Junior Watson – Jumpin’ wit Junior. Junior Watson es, indefectiblemente, el máximo exponente del blues californiano actual. Ocupó el lugar vacante que dejó la temprana muerte de Hollywood Fats y con los años no hizo más que pulir su estilo que es una combinación de jump blues y Texas. Watson, cuyas principales influencias son Pee Wee Crayton, T-Bone Walker y Luther Tucker, se formó tocando junto a Canned Heat y Rod Piazza. A pesar de tener una larga trayectoria, éste es el tercer disco de su carrera, los anteriores fueron editados en 1994 y en 2002. Pero nunca estuvo desempleado: participó de decenas de sesiones de estudio junto a músicos como Charlie Musselwhite y William Clarke. El flamante Jumpin’ wit Junior parece que fue grabado en 1950. El sonido es tan anacrónico como estimulante. En un punto el álbum se asemeja a los dos últimos que editó Jimmie Vaughan, pero el estilo de Watson es completamente diferente al del hermano de SRV. “En este disco realmente capturé los tonos y la atmósfera que siempre escuché en mi cabeza pero que nunca pude plasmar en una grabación”, dijo Watson, que utilizó para estas sesiones una guitarra diseñada exclusivamente para él por Dan Dunham. Un disco óptimo para los amantes del sonido retro.
Johnnie Bassett - I can make that happen. Johnnie Bassett es un peregrino del blues. Nació en Marianna, Florida, hace 76 años. Pero antes de cumplir los diez años su familia se mudó a Detroit. Allí, siendo adolescente, empezó a escuchar a músicos del Delta, como John Lee Hooker, aunque su máxima influencia terminó siendo T-Bone Walker. Tiempo después tocó en la banda de Smokey Robinson y llegó a Chicago donde participó de algunas sesiones para el sello Chess. Durante los 60 se instaló en Seattle donde compartió escenarios con Jimi Hendrix y Tina Turner. Pero luego volvió a Detroit donde todavía vive. Pese a su extensa carrera, su discografía es limitada. I can make that happen es su séptimo disco solista, aunque en esta oportunidad lo acompañan los Brothers Groove en lugar de los Blues Insurgents. Aquí, Bassett destila todo su potencial, que combina jump blues, sonido Motown, jazz y R&B. Hay un muy buen dueto con la cantante Thornetta Davis, en Teach me tol ove, y también dos covers exquisitos de Solomon Burke, Cry to me, y Lowell Fulson, Reconsider baby. Pese a su dilatada trayectoria, su nombre sigue siendo desconocido para el gran público blusero. Este álbum es una buena forma de empezar a conocerlo.
Omar and the Howlers - I'm Gone. Aunque parezca mentira, ya hace medio siglo que Omar Kent Dykes toca blues. Nació en McComb, Mississippi, la ciudad de Bo Diddley, y creció en otras ciudades del estado como Hattiesburg y Jackson, donde empezó a tocar la guitarra cuando tenía 12 años. Pero su lugar en el mundo lo encontró a mediados de los 70 en Austin, Texas. Allí formó a los Howlers, banda con la que ya editó más de una docena de álbumes, desde su debut discográfico de 1980, Big leg beat. En I’m gone, Omar rinde homenaje a todos los estilos que moldearon su forma de tocar. El repertorio son todos temas propios, a excepción del cover Move up to Memphis, de John Lee Hooker. Por momentos, Omar canta como si fuera la reencarnación de Howlin’ Wolf y toca su Fender Stratocaster con una prestancia notable. La selección de temas es variopinta: hay boogie (Omar’s boogie), slow blues (Lone star blues), balada (Let me hold you) y down home blues (I’m mad again). Y hay mucho más en esta celebración: el estilo texano se hace presente en Going back to Texas y su admiración por Bo Diddley se trasluce en la hipnotizante Wild and free. I’m gone es un alegato blusero contundente, es la síntesis de una carrera formidable.
3 comentarios:
Qué es el "down home blues"?
Si bien down home blues no está tipificado como un estilo dentro del género, es una forma de llamar al blues de juke joint del Delta: crudo, agresivo, provocador, descarnado y potente.
tomo nota de cada uno de ellos. GRacias por la info, un abrazo,
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