Un viejo maestro volvió a los estudios de grabación cuando se cumplen 25 años de su álbum debut, King of the jungle, que lo llevó a las grandes ligas del blues. Eddie C. Campbell no cambia la fórmula, su forma de sentir y tocar los blues sigue siendo la misma. Para esta nueva aventura discográfica eligió una banda nutrida de familiares, entre los que está otra leyenda de Chicago, su ahijado Lurrie Bell.
Spider eating preacher es su segundo trabajo para el prestigioso sello Delmark; el primero fue Tear this world up, de 2009. Aquí, Campbell ratifica que el sonido de Chicago está más vigente que nunca, que los músicos de la vieja guardia pueden seguir levantando la bandera que heredaron de sus maestros, aquellos que hoy son próceres indiscutidos del género. Es que la historia de Eddie C. es como la de muchos otros de sus contemporáneos: emigró del Mississippi a Chicago en busca de una vida mejor; se colaba para escuchar a Muddy Waters en el 1125 Club; hizo sus primeras armas musicales en el West Side junto a Magic Sam y Luther Allison; y tocó en las bandas de Koko Taylor, Jimmy Reed, Willie Dixon y Little Walter.
Este disco, de nombre enigmático, tiene doce canciones nuevas, que fueron compuestas por la sociedad que Eddie forma con su esposa Barbara Mayson, quien aquí también toca el bajo en seis temas. El hijo de ambos, David, tiene una discreta -pero para él seguramente alucinante- participación: toca el violín en dos canciones. Completan la banda: el tecladista Daryl Coutts, Aaron Getsug (saxo), Marques Carroll (trompeta), Robert Pasenko (batería) y Vuyani Wakaba (bajo).
Lo más notable es la participación de Lurrie Bell. Si bien no es la primera vez que graban juntos -Lurrie tocó el bajo en King of the jungle-, ahora están de igual a igual. Alternan la guitarra y la armónica en una comunión musical fascinante. Un claro ejemplo de eso es el mano a mano acústico incendiario con el que cierran el álbum. Playing around this blues comienza con Eddie preguntándole a Lurrie: “¿Estás listo para tocar un blues?”. Y Lurrie responde: “Por supuesto que estoy listo”. ¡Imagínense lo demás!
Los otros tres temas que completan el track list son Cut you a-loose, de Mel London; All my life, de Jimmie Lee Robinson; y Skin tight. En definitiva, es un álbum muy bueno en el que se combinan unos blues duros con algunos suavizados por el groove de los teclados y los vientos. Los seguidores del blues de Chicago van a saber apreciarlo, pero también es un disco interesante para aquellos que busquen un sonido más fresco y renovado sin alejarse mucho de la tradición de la Ciudad del Viento.
3 comentarios:
cada vez estoy mas convencido que no hay mejor manera de honrar el blues que regar las raìces! buen disco.
Muy bueno Martin, Eddie C y Lurrie...que buena dupla. Un abrazo . MC
Que leeeeendooooo gran noticia!
Publicar un comentario