Pocas bandas actuales combinan fuerza y talento como los North Mississippi Allstars. Los hermanos Dickinson, hijos del legendario Jim Dickinson, han consolidado un estilo que custodia y expande al mismo tiempo la tradición del Hill Country blues.
En su flamante álbum, World boogie is coming, se nota patente la influencia de R.L Burnside, desde el comienzo en temas como Goat meat y Rollin’ & tumblin’, aunque también repercute el boogie hipnótico de John Lee Hooker. Además hay una notable mixtura que incluye guitarras dobro y eléctricas, loops, bases electrónicas, efectos de scratch y arreglos audaces. Todo eso genera un sonido único, absorbente y cíclico.
Chris Chew, Luther y Cody Dickinson |
World boogie is coming es su noveno álbum y supera todas las expectativas. En cada uno de sus discos, los hermanos fueron un poquito más allá en la experimentación pero, vaya paradoja, sin alejarse de sus raíces. Aquí llevan el dance al juke joint de una manera brutal. Es imposible resistirse a semejante andanada rítmica. En ese sentido, Snake drive, de R.L. Burnside, es uno de los temas mejor logrados. Ese no es el único cover. Hay una hermosa interpretación de That dog after that rabbit, inspirada en Otha Turner; y versiones muy personales de My babe, de Willie Dixon, y Goin' to Brownsville, de Sleepy John Estes y Furry Lewis. Pero el más furioso, el más áspera de todos, es World boogie, de Bukka White.
Robert Plant |
Con este trabajo, los North Mississippi Allstars se superan a sí mismos. World boogie es el punto más alto de todo lo que hicieron hasta ahora y los posiciona como los dueños absolutos del sonido del norte del Mississippi. Allí, al sur de Memphis y cerca de la ciudad de Oxford, el boogie asesino resguarda la tradición y augura un futuro más que promisorio.
1 comentario:
buenisimo!!
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