viernes, 19 de diciembre de 2014

Hombre de blues


Osvaldo Ferrer es uno de los pioneros del blues en la Argentina y, sin embargo, es prácticamente un desconocido para los bluseros locales. Su figura, siempre estuvo más emparentada con el jazz tradicional, especialmente por su rol como clarinetista de la legendaria Antigua Jazz Band, pero sus gustos musicales siempre fueron más allá. Durante los shows de la banda, Ferrer solía tener su momento personal y bien blusero, en el que se acompañaba con la guitarra y tocaba uno o dos temas. Así fue como en 1971, en el Volumen II de la Antigua, registró como solista el Black snake blues, de Blind Lemon Jefferson, tal vez la primera grabación de un blues rural en el país.

Hoy, a más de 40 años de ese acontecimiento, Ferrer reaparece en el mundillo blusero con un disco extraordinario en el que, con notable técnica vocal y una amplia formación musical, recrea viejos clásicos del género.

Acompañado por Debluvan, grupo integrado por el guitarrista Santiago “Rulo” García y el contrabajista Nicanor Suárez, Ferrer grabó nueve temas entre los que se destacan Rollin’ & tumblin’, Trouble in mind, Blues before sunrise y Aunt Hagar’s blues. En el álbum también participan como invitados el baterista Timothy Cid, de la banda de Willy Crook, y el pianista Alejandro Kalinoski. El slide de García y los arreglos de Suárez fueron las claves para que la voz de Ferrer se luzca en el marco adecuado.

“Osvaldo quería armar algo de blues por fuera de la Antigua Jazz Band. Entonces se lo propuso a Nicanor y, en 2012, éste me convocó a mí como guitarrista. Nicanor y yo habíamos tocado juntos en el quinteto de Black Amaya y a mí me interesó el proyecto. Empezamos a tocar de manera despojada, por placer, y nos maquinamos. Primero grabamos de forma casera y el resultado nos pareció muy interesante. Al final surgió la posibilidad de ir a grabar al estudio Casa Frida, en Villa Crespo, que es un lugar ideal para acústicos porque está todo revestido en madera. El técnico de grabación comparó las sesiones con las de American Recordings, que Rick Rubin realizó con Johnny Cash en sus últimos años de vida”, cuenta Rulo García, quien, como la mayoría de los bluseros argentinos contemporáneos, apenas había oído hablar de Ferrer y de su trayectoria antes de sumarse al proyecto.

El disco se llama Blues, ¡cómo podía llamarse sino!, fue editado por Fonocal y es una brillante síntesis de una pata del género no muy explorada por los músicos argentinos, que rescata a un verdadero hombre de blues.


3 comentarios:

Blusero Asombrado dijo...

Jodeme! Y todo eso que habian escrito grezer y la escuela del blues que ellos eran los primeros en esto, en lo otro y en todo? un tipo en el 72 grabo a blind lemon? es el apocalisis!!!

Goyo Delta Blues dijo...

Éxitos Ferrer! Buen 2015 para todos.

Diego Czainik dijo...

Buenisimo!!!!