|
Fotos: Edy Rodríguez |
Javier Vargas pisó un escenario argentino por tercera vez en su vida. Raro para un artista que creció y tiene muchos amigos aquí, y que grabó un disco tributo al rock nacional. Su primer show fue en Prix D'ami en 1994, el segundo en 2007 en el Teatro Metropolitan. Ayer, se presentó junto a su Blues Band y músicos invitados en el Teatro Coliseo. En las dos horas y media que duró el recital, repasó temas de distintos momentos de su carrera e interpretó algunos covers con mucha energía rockera.
Fue una buena noche de música ante poco público. La selección de temas podría dividirse en tres partes. Por un lado, la que primó casi toda la noche fue su fusión de rock y blues, con extensos solos de guitarra, mucho juego de pedales y palanca, incursiones con el slide, y cantados por el inglés Gaz Pearson, que combina el estilo de Memphis con ciertas influencias de Paul Rodgers y Robert Plant. El primer cuarto de hora fue muy potente: abrieron con Rollin’ & trance y el blues recién se hizo presente tres canciones después con Back alley blues, en el que hubo un breve pero intenso duelo entre Vargas y el tecladista argentino Pehuén Innocenti, que acompañó a la banda durante todo el show. Pearson dejó el escenario y el bajista Luis Mayol, argentino también, cantó una muy buena versión de Love me two times, de los Doors.
|
Javier Vargas |
Fue a partir de ese tema, en el que el recital entró en su mejor momento. Vargas es un maestro para fusionar el blues con ritmos latinos, el flamenco y el tango. Y así lo ratificó anoche. Con Miguel Fraca en bandoneón interpretaron Buenos Aires blues y Amapola negra, de Andrés Calamaro. Siguió con Blues latino y luego, con Mayol y Pearson cantando juntos, regaló la extraordinaria y
santanesca Chill out (Sácalo). La siguiente canción, el
slow blues Parisienne Walkaways, se la dedicó a Gary Moore y Paco de Lucía. El último tramo, que incluyó temas como Back to the city, Ride baby ride, Palace of The King y Man on the run tuvo la impronta del comienzo y eso hizo que se volviera un tanto monótono, salvo por el cierre que incluyó un gran solo de bajo de Mayol y otro enérgico y contundente del baterista holandés Peter Kunst.
Los bises llegarían con los guitarristas invitados. Vargas sostuvo su Strato marrón con firmeza e invitó a escena a José Tealdi con quien interpretó Big boss man. Luego apareció en escena el cordobés Alberto Pol Castillo, a quien se lo notó muy emocionado. Juntos tocaron Make sweet love 2 U. El tercero en aparecer fue un apático Diego Mizrahi para una versión de Blues local, de Pappo, que cantó Mayol y que, curiosamente, el holandés Kunst acompañó en coros. El último en subir fue Conejo Jolivet con su Gibson SG para un crujiente y visceral cover de Sunshine of your love.
|
Matías Cipilliano |
La previa había estado a cargo de Con Alma de Blues Band, la creación de Pollo Zungri, que tiene entre sus miembros a Diego Czainik (voz), Matías Cipilliano y Pablo Martinotti (guitarras), Nico Smoljan (armónica), Nandu Tecla (piano), Daniel Chusit (bajo) y Víctor Hamudis (batería). Iinterpretaron media docena de clásicos: Shake, rattle & roll, Cherry red, That's all I need , Woke up this morning, Further on up the road y Steamroller blues. En todo el set primo el buen gusto y la pasión por blues, algo a lo que Vargas después le agregó mucho rock y pinceladas latinas cargadas de emoción.
3 comentarios:
Que lo parió.... Gracias mil!! Muy bueno
Crujiente que pasó hicimos un terremonto con Vargas? jajajjajajaj
aunque sea decir si fué buena o no...tiíiiiio!
Gracias x la mencion amigo! se super agradece!
PD: claro que estaba emocionado! sabes lo que es criarte escuchando desde los 15 años su musica, ser mi héroe de la guitarra vivo y ACCESIBLE fundamentalmente!!
Abrazos Martin querido!
Publicar un comentario