lunes, 7 de marzo de 2011

British invasion

Adele – 21. Algunos dicen que esta joven inglesa es la “nueva Amy Winehouse”. Creo que esas comparaciones son siempre odiosas. Adele es Adele. Si bien es cierto que tiene un tono de voz similar al de Amy, el resto de su producción, puesta en escena y hasta su aspecto están en las antípodas. Su caso es muy particular: desde la época de los Beatles ningún artista había logrado tener dos discos en el top five británico. Es decir, sus trabajos 19 y 21 se regodean en el chart y Adele no para de sumar seguidores. Más allá de esta cuestión híper comercial estamos en presencia de una gran cantante y compositora, que supo absorber lo mejor de divas como Dusty Springfield, Carole King, Lisa Stanfield y Etta James. 21 es un gran álbum en el que se destacan dos canciones extraordinarias: Someone like you y Rolling in the deep.

Beady Eye - Different gear, still speeding. Luego de la pelea entre los hermanos Noel y Liam Gallagher en 2009, que terminó con la partida del primero de Oasis, el segundo decidió seguir adelante junto a Gem Archer, Andy Bell y Chris Sharrock. Si bien es cierto que en algún momento pensaron seguir enrolados bajo el nombre que los hizo tan famosos, luego optaron por llamarse Beady Eye. Según Liam, el nombre lo eligieron porque es “fucking cool”. Obviamente este disco podría ser un nuevo álbum de Oasis, aunque tiene un sonido bastante más retro, ya que Noel era quien estaba más volcado a la música moderna. Aquí tenemos buen rock and roll, con guitarras furiosas y con algún guiño al blues en el que sobrevuela una armónica chillona. En Different gear, still speeding quedan bien patentes las influencias beatle y stone de Liam.

Radiohead - The King of Limbs. Mi relación con Radiohead es muy particular. Los amantes de la banda seguramente no van a estar de acuerdo conmigo: creo que sus discos de los noventa, The Bends y Ok Computer, son insuperables y todo lo que hicieron desde entonces está dentro de un espiral creativo y experimental bastante elitista. Es difícil que alguien que escucha blues disfrute de algunos de sus últimos trabajos, incluso de su ópera maestra Kid A, el álbum con el que abrieron la década pasada. La fusión de texturas y sonidos, y su perpetua búsqueda de lo nuevo están dirigidas a un público fiel que ya tiene el oído acostumbrado a su música. En definitiva, para los bluseros y los rockers este disco puede servir como una “cortina”, para escuchar algo distinto cuando pinte. Pero si eso ni siquiera les interesa, no pierdan el tiempo: ninguna de las ocho canciones los va a conmover.

3 comentarios:

lucho dijo...

desde cando escuchas radiohead?

Maxi! dijo...

Discazo el de Adele, no paré de oirlo desde que mi compañera Elena y yo lo descubrimos.

En cuanto a Radiohead, yo estoy con vos, creo que cambiaron el rumbo de la música en su momento, OK COMPUTER borró del mapa el brit pop, pero que lo que acaban de estrenar, sin ser malo, no es nada del otro mundo.

Hoy me acordé mucho de mi amigo Martin. Justo debajo de mi oficina, hay una exposición belga que relaciona Comic con Jazz...lo hubieramos pasado en grande recorriendola los dos.

Fero Soriano dijo...

El de Radiohead vuela pelucas. Una vez más.