martes, 20 de octubre de 2009

¿Para tomar o coleccionar?

El otro día vi esta foto de la agencia AP y me llamó la atención. Se trata de cuatro botellas de 1875 Armagnac Vieux, cubiertas de un hongo negro. La información además decía que iban a ser subastadas junto a otras 450.000 botellas de la bodega del legendario restaurante parisino Tour d'Argent. El motivo de la subasta es que el restaurante quiere reducir el stock de los vinos que tiene en abundancia para variar y modernizar su selección. Los precios estimados para la subasta, que se hará entre el 7 y 8 de diciembre, empiezan en 10 euros y ascienden hasta los 3 mil.

La foto me disparó una serie de preguntas. ¿Se puede tomar un vino de 1875? ¿Cómo estará el corcho? ¿Más que el vino lo que se cotiza es la botella? Entonces decidí consultar a dos especialistas que me dieron dos opiniones diferentes.

Andrés Rosberg, presidente de la Asociación Argentina de Sommeliers (AAS), me respondió: “Si es Armagnac, es primo hermano del Cognac, ergo con una graduación cercana a los 40°. Y si tiene 40° el paso del tiempo no le hace nada, ya que no hay bacteria ni microorganismo que se la banque, con lo cual debería estar tomable. El corcho, sí, seguramente esté en malas condiciones, pero eso no es mayor problema”.

Por su parte, Daniel López Roca, director del sitio especializado Argentine Wines.com y creador del concurso Vino Sub30, me contestó lo siguiente: “Hay un viejo chiste sobre un pescador que llegó con su carga de atún al puerto y allí vendió todo a 10 pesos el kilo. El comerciante que lo compró puso la carga en un vagón de tren y partió hacia el centro del país. Llegando a una ciudad distante 100km del mar vendió todo el pescado a otro negociante a 20 pesos el kilo. Lo puso en un camión y partió hacia más adentro. A los 400 kilómetros llegó a un mercado y puso en venta su pescado, allí un hombre interesado le preguntó cuánto costaba, y él le dijo 40 pesos el kilo. El comprador dijo que estaba de acuerdo pero quería inspeccionar la mercadería. Al abrir el cargamento comprobó que los atunes estaban malolientes luego de tanto trajín. El comprador, molesto, le dijo que ese pescado no se podría comer. El vendedor le explicó que estaba en lo cierto, que había pescados para comer y pescados para vender, estos eran del segundo tipo”.

4 comentarios:

Daniel López Roca dijo...

Valga la aclaración, spirits son spirits y vinos son vinos. En el caso de un spirit tendría la curiosidad de beber lo que bebió Alfonso XII. En el caso de un vino, prefiero uno fresquito, de no más de 20 años.

Ulises Beppo dijo...

la respuesta es obvia; "me asesoraría, y si efectivamente se puede tomar, lo tomaría"

Fede dijo...

beber, que coleccionen la botella

Grace Pousá dijo...

pensandolo bien...colecciono la botella con corcho y todo, es una reliquia....el contenido de 134 años me da cosita...!!!!