jueves, 15 de julio de 2010
De la barrica
Después de una semana ajetreada, no hay nada mejor que sentarse con algún amigo y revolver un gran copón repleto de vino. Así lo hicimos hace un par de jueves con René Roca. Tomamos un Martín Koch cabernet sauvignon 2004 con trece meses en barrica. La verdad no podría decir con qué comida acompañarlo. Pero entiendo que no va a quedar mal con ninguna (salvo que coman alcauciles). Es un vino untuoso, distinto, que vale la pena probar para salir un poco del molde de las marcas tradicionales. Esta botella llegó a mis manos a modo de agradecimiento, por unas entradas que regalé para el show que Madeleine Peyroux dio en el Gran Rex. Y fue justo: me perdí un gran recital, pero tomé un muy buen vino.
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2 comentarios:
Muy buena idea. Es lo mejor para relajarse...un amigo, una copita de vino y buena música.
Mordaza!!!
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