Poco antes de las 10 la noche el Chavo Fucks se paró en el medio del escenario y anunció lo que vendría: una fiesta de blues comandada por uno de los bateristas más prestigiosos de los Estados Unidos. Prestigio que Tony Coleman ganó tocando junto a B.B. King y otros emblemas del blues como Albert King, Otis Clay, Bobby Bland y Albert Collins. El show duró casi dos horas y rompió un poco el molde de lo convencional. Se podría desglosar así: homenaje, zapada y humor.
Los homenajeados fueron dos: B.B. King y Pappo. Tony Coleman es un gran cantante y le dedicó al Rey del Blues tres temas con mucho feeling impostando la voz tal como aprendió de él. Rock me baby, The thrill is gone y How blue can you get conformaron ese segmento en el que el guitarrista Omar Itcovici aprovechó para lucir su Flying V. El homenaje a Pappo, en lo musical, incluyó dos temas: Blues local y Desconfío. Para cantarlos subió al escenario una tal Barbie, aunque Tony Coleman se animó a cantar en español un verso de Blues Local. El baterista también saludó y se emocionó con Liliana y Georgina, hermana y sobrina del Carpo. El homenaje había empezado un día antes cuando fue a visitar el monumento que le hicieron a Pappo en La Paternal.
El show fue una gran zapada. Es cierto que hubo algunos desacoples al principio y el volumen de las guitarras estaba bajo. Pero eso es anecdótico. Para haber ensayado sólo un día, todo salió muy bien. Además de Itcovici, tocaron Alambre González (guitarra), el Bohemio Rubinsztein (bajo), Machi Romanelli (teclados), Matías Jablonsky (saxo alto) y Mariano Cardozo (saxo tenor, productor y responsable de esta fiesta). El comienzo del show fue con una absorbente versión de Watermelon man y después siguieron con lo que me pareció un tema de Albert Collins. También tocaron un par de canciones del propio de Tony (What’s it gonna take y uno dedicado a Albert King) y un cierre fantástico con Let the good times roll y Stormy Monday. Vi el show junto a Juani Sixto quien quedó extasiado con el sonido hammond de Romanelli.
Si piensan que el humor estuvo a cargo del Chavo Fucks (que apellido tan arrogante), se equivocan. Fue todo de Tony. Si el tipo se dedicara al stand up comedy sería muy bueno. Hizo muchos chistes y recordó uno que le había hecho Pappo sobre un pajarito puteador. No paro de arengar y hacer gestos al público para que se prendiera con él cuando meneaba su gruesa cadera y lo mejor vino con su excéntrico solo de batería. Empezó machacando bombo, redoblante, toms y platillos con locura. Después se paró y empezó a rodear la batería mientras seguía el ritmo del aplauso del público. Se acostó en el piso boca arriba y, percutiendo desde abajo, tocó durante varios segundos. Después empezó a caminar por el escenario y a darle con los palillos a todo lo que tuviera por delante hasta que llegó al borde del escenario, hizo subir a una mujer y, suavemente, siguió tocando sobre sus manos extendidas.
Cuando todo terminó, Tony fue al hall del teatro a firmar autógrafos y saludar a la gente que ya empezaba a irse luego de una noche muy cálida. El recital también dejó un anuncio: dentro de poco Tony vendrá de nuevo a Buenos Aires. Pero no lo veremos en remera y jean tocando de nuevo en el Teatro IFT, sino que será luciendo un moño como toda la banda de B.B. King. Sí, el Rey del Blues se presentará en el Luna Park el 26 de marzo. Mr. Coleman… ¡Hasta entonces!
2 comentarios:
HOLA MARTIN,TE LO TOME PRESTADA LA NOTA...MUY BUENA!!
GRACIAS POR EL DISCO
UN ABRAZO
Muy buena la nota, la tal Barbi, es Barbara Corvalan, canta hace mas de 10 años, compartio escenario con Alejandro Medina, el negro García Lopez, etc., y en el segmento dedicado al Carpo tocaron tambien "Tucan"Stalo y El Vasco de los Chevy Rockets entre otros.
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