Jimmie Vaughan – Baby, please come home. El sexto disco solista de Jimmie Vaughan es una colección de viejos jump blues y clásicos del rhythm and blues con algunos pasajes dedicados al doo woop y otros al rockabilly. Pasaron 25 años desde su debut en solitario (Strange pleasure, 1994) y, si bien siempre se pudo reconocer su estilo con apenas unos acordes, el Vaughan que vemos ahora es el que empezó a pulir en el nuevo milenio, especialmente con la saga de discos Plays blues, ballads & favorites. Baby, please come home representa la continuidad estilística de esos trabajos lanzados en 2010 y 2011, más allá del breve proyecto Jimmie Vaughan Trio, con el que lanzó un álbum en vivo, en 2017. Aquí lo encontramos en gran forma acompañado por tremendos músicos como el tecladista Mike Flanigan y los saxofonistas Kaz Kazanoff y Greg Piccolo. En cada una de las once canciones, el guitarrista texano se desenvuelve con gran destreza. Si bien los temas son todos covers, de alguna manera Vaughan logra interpretarlos como si fueran propios. Se destacan I'm still in love with you, de T-Bone Walker; Baby, what’s wrong, de Jimmy Reed; So glad, de Fats Domino; y la fabulosa It’s love, baby (24 hours a day), que solía cantar magistralmente Ruth Brown. En algunas ediciones hay dos bonus tracks grabados en vivo, Silly dilly woman y Exact change, que redondean un álbum estupendo. Vaughan volcó su alma, su experiencia y su técnica en este puñado de viejas canciones y eso ya es más que una buena noticia.
The B.B. King Blues Band - The Soul of the King. El Rey estaría orgulloso de ellos. Sus músicos, los que lo acompañaron por todo el mundo hasta su muerte, decidieron seguir adelante para mantener vivo su legado y transmitir todo lo que él les dejó. Encabezados por el genial James “Boogaloo” Bolden, cantante, trompetista y director musical, la banda demuestra en 13 canciones porque fueron los alfiles del Rey y también porque pueden seguir en honor a su nombre y respaldando a otros grandes músicos. La banda la completan Russell Jackson (bajo y voz), Jesse Robinson y Wilbert Crosby (guitarra), Brandon Jackson y Herman Jackson (batería), Lamar Boulet (trompeta), Eric Demmer y Walter King (saxo), Raymond Harris (trombón) y Darrell Lavigne (teclados). El disco cuenta con grandes invitados: Kenny Wayne Shepherd aporta su filosa guitarra en Irene, Irene, mientras que Kenny Neal se suma en voz, guitarra y armónica en Sweet little angel. Diunna Greenleaf canta There’s must be a better world somewhere y la dupla Taj Mahal-Mary Griffin combinan sus voces en el clásico Paying the cost to be the boss. Y hay más: Kenny Neal vuelve para llevar Becoming the blues a un estado de front porch y Joe Louis Walker hace su aporte vocal y guitarrístico en Here today, gone tomorrow. El cierre es todo del cantante y guitarrista Michael Lee, quien tuvo una rutilante aparición en el programa The Voice, una especie de American Idol que emite la cadena NBC. Los “chicos” de B.B. siguen adelante y van por más, porque eso es lo que el Rey quería de ellos.
2 comentarios:
Hola Martin. Siempre buenas tus coberturas, el de Jimmie es Fantastico, y el De BB debo escucharlo. Me hizo bien ver que esta Herman Jackson a quien considero un gran heredero de Calep , que es dios ( no asi Tony Coleman a mi juicio). Jackson vino aca con The Kings en el 2016. Es increible
que buena data
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